Thursday, December 01, 2005

Acércame tu huida.

Capacidad de respuesta. Me asombra. Y tu ilimitada ansia por preguntar... me desconcierta. Si no te agrada mi lema, cambia de candidato. No pretendas modificar la manera a la que no has pertenecido. Desde fuera no puedes decidir cuándo entrar, aunq lo creas.
Te ves preparado pero olvidas q aquí dentro lo estamos desde siempre. Con conocimiento de causa, de efecto, y de la evolución q has vivido entre las sombras. Por si el fruto no era el esperado, por si caía demasiado pronto y la evidencia te marcaba.
Evidente. Cobarde. Tanto como para no mostrar el pecado, el pecador, ni la razón por la que has hablado. Mi rabia siempre te ha mantenido agazapado hasta entender el porqué de tanta contención. Mueres si piensas q sobrevivirás a tanta inercia. No puedes con un péndulo que siempre volverá para empujarte. Crees q tus días son distintos? Tienen el mismo tiempo y la misma función. Ves las mimas puertas... pero miras de reojo antes de abrirlas. Así te da la sensación de repetir demasiadas veces... la misma equivocación (eso sólo lo sé yo).
Corre. Sube sobre el muro evitando mi humor y deslízate sigiloso hasta saber cuál es la combinación q más uso. Pero, no olvides, que la técnica ha sido depurada. Y q debajo de toda esta ropa se ven los restos de la batalla.
Tú no pierdes prenda pq no juegas. Y si no juegas hasta quedarte con la mente al aire... entonces el golpe es más doloroso... pero... aún con menos fuerza, duele más.
Mis marcas son profundas. Y las de tantos otros. Lo peor? Q he aprendido a convivir con una paliza irracional, secundaria, intermitente pero incapaz de emigrar hacia otro cuerpo. Ha encontrado su ración casi diaria, lo cual, para un dolor vulnerable, es una suerte. La mía tb, por saber resistirlo. Desgracia resistida resiste al desgraciado.
Todo mi odio. Toda mi apatía. Ahí están, en la bolsa que encontrarás en la entrada. Estoy buscando lo que siempre se me olvida. Luego te dejaré partir, porq aunq yo me quede con las paredes, será el viaje más lejano en el espacio. El tiempo te lo quedas. No lo especifiqué en la separación de bienes pero estoy segura de que te deslumbrará tanto que no caerás en el engaño. Sutil. No ofensivo. No tramposo. Sólo con meditarlo lo dejarías en el suelo y una nota para mí: "Todo tuyo; mi infelicidad no necesita más tiempo que el q me queda".
Oh. No la veo. No has pensado lo suficiente. Te has quedado arriba. Con buen estilo, eso sí. Quien te vea será tocado por la envidia. Quien te oiga quedará marcado. Pues bien, yo miro mi marca. Es a fuego, y la veo siempre si no estoy atenta. Si la esquivo me preocupo, y si la toco me duele su recuerdo. Pero ya me es indiferente lo que hagas mientras huelo la yaga, mientras llega un olor que sólo me recuerda pasado. Has quemado el pergamino y las noticias no son frescas.
Sube. Otro tren te espera. Buen viaje.

1 comment:

Anonymous said...

...lo mejor de todo es que aún estando en distintas dimensiones en nuestra perspectiva de las cosas,estemos tan cerca en lo más importante!...a hacer balance,que ya es diciembre!