La tentación reclama su precio cuando decides ignorarla. Caes con más peso del que sabes que podría superar.. Soportarlo será irresistible pero tu ausencia puede rebelarse contra toda la energía q me arrebates. Sabes q no opondré resistencia. Da igual el dolor. Da igual q pagues conmigo cuantas venganzas residan en tu inconsciente.
Mi conciencia, toda. Mi pudor, embelesado por ti, fundido con tu descaro en una danza irreversible. Tu encanto? Junto a mí, en la cama q lo ha visto crecer. Nada como tus piernas para no querer salir corriendo. Nada como tus brazos para avanzar y pedirte mil veces.
Tu cara obeserva mientras tus ojos no pueden apartarse del único punto que dejaré a la vista, a la tuya, y q todavía no has acertado a saborear. Si te acercas, el perfume embriagará tus sentidos. Si te acercas, tu fragancia se hará doble, o mitad después de marcar mis líneas con ella.
El contorno te espera, delineante. El proyecto es tuyo y tuyos fueron todos los planos erróneos. Aunq sé... sé que sabías q el tiempo volvería a pecar de excesos y el deseo lo vencería de nuevo. Siempre! Al fin y al cabo, como humano, la dimensión puede atribuirse a su impaciencia. Reparte, y la mejor parte será para el que no decida pensar en lo empleado. Sólo en su deseo, el inmediato y en la memoria a corto plazo. Querer, querer, querer. Olvidaste eso cuando saliste y no comprobaste si me quedaba mirando. Lo supusiste? Oh. Arriesgado. Obvio.
Necio. Ignoras que podré verte aunq no corra para comprobar lo acertado de mi memoria. Es en el retiro dd puedo pensar con calma el porqué de mi tormento, y del tuyo, q no por estímulo me siento inocente. Si aplaco tu contratiempo quedarás saciado... hasta q tu presente vuelva a jugarte la misma mala pasada, la que te juega siempre y a la que te has aficionado. Ya no es culpa del juego, ni del dado, ni del azar de tus tiradas. Tu predisposición es buena. La ficha? Ya no sabes ni por qué utilizas cada color, sólo sabes q es una dirección la q podría salvarte. Por eso vienes?
Yo tb recuerdo la flecha, aunq haga más tiempo que no la veo. Y seguro q nadie la ha tocado. No era hacia aquí, alma vulnerable. No es tu fuerza, sólo tu deseo acumulado. La banca se queda con todo. Apuesta tu vida hipotecada con quien quiera creer q es tu decisión (meditada, por supuesto). La mía se ha cansado de apostar por ti, y decidir q aunq iluso, seguía siendo mi felicidad futura, hipotética y desconcertante.
Prefiero mi amargura controlada. Mi fantasía contigo se nutre de pequeños fracasos. Y es así, y no materializando tu pequeño carácter, como puedo disfrutar de nuevos juegos. Y entregarme.
EL bote está en el baño. Si tiras.. la cadena recobra su paso. En él, no queda espacio para tu dubitativo sinvivir. El mío, por el contrario, ha decidido vivir sin ti.
Mi conciencia, toda. Mi pudor, embelesado por ti, fundido con tu descaro en una danza irreversible. Tu encanto? Junto a mí, en la cama q lo ha visto crecer. Nada como tus piernas para no querer salir corriendo. Nada como tus brazos para avanzar y pedirte mil veces.
Tu cara obeserva mientras tus ojos no pueden apartarse del único punto que dejaré a la vista, a la tuya, y q todavía no has acertado a saborear. Si te acercas, el perfume embriagará tus sentidos. Si te acercas, tu fragancia se hará doble, o mitad después de marcar mis líneas con ella.
El contorno te espera, delineante. El proyecto es tuyo y tuyos fueron todos los planos erróneos. Aunq sé... sé que sabías q el tiempo volvería a pecar de excesos y el deseo lo vencería de nuevo. Siempre! Al fin y al cabo, como humano, la dimensión puede atribuirse a su impaciencia. Reparte, y la mejor parte será para el que no decida pensar en lo empleado. Sólo en su deseo, el inmediato y en la memoria a corto plazo. Querer, querer, querer. Olvidaste eso cuando saliste y no comprobaste si me quedaba mirando. Lo supusiste? Oh. Arriesgado. Obvio.
Necio. Ignoras que podré verte aunq no corra para comprobar lo acertado de mi memoria. Es en el retiro dd puedo pensar con calma el porqué de mi tormento, y del tuyo, q no por estímulo me siento inocente. Si aplaco tu contratiempo quedarás saciado... hasta q tu presente vuelva a jugarte la misma mala pasada, la que te juega siempre y a la que te has aficionado. Ya no es culpa del juego, ni del dado, ni del azar de tus tiradas. Tu predisposición es buena. La ficha? Ya no sabes ni por qué utilizas cada color, sólo sabes q es una dirección la q podría salvarte. Por eso vienes?
Yo tb recuerdo la flecha, aunq haga más tiempo que no la veo. Y seguro q nadie la ha tocado. No era hacia aquí, alma vulnerable. No es tu fuerza, sólo tu deseo acumulado. La banca se queda con todo. Apuesta tu vida hipotecada con quien quiera creer q es tu decisión (meditada, por supuesto). La mía se ha cansado de apostar por ti, y decidir q aunq iluso, seguía siendo mi felicidad futura, hipotética y desconcertante.
Prefiero mi amargura controlada. Mi fantasía contigo se nutre de pequeños fracasos. Y es así, y no materializando tu pequeño carácter, como puedo disfrutar de nuevos juegos. Y entregarme.
EL bote está en el baño. Si tiras.. la cadena recobra su paso. En él, no queda espacio para tu dubitativo sinvivir. El mío, por el contrario, ha decidido vivir sin ti.
Sin duda.
No comments:
Post a Comment