Monday, June 19, 2006

Ida, ida, ida

Y no se daba cuenta
De que lo tenía todo dentro
Todavía no sabía
Que yo no era su dueña

Lo supuso
Sospechó el cautiverio
Huyó poseída
Posesiva, por el miedo

Quise volver para atraparla
Quise ir y aclararle
Mi amor sin condiciones
Mi tiempo incondicional

La espera sin el límite ni la razón
El tiempo irracional y limitado
La indiferencia
La tuya
Mi pretensión diferente
La que te atrapa
La mía

Es la línea infinita
La que puede quitarte la razón
El sueño efímero en el momento
En las sonrisas
En lo que trae el tiempo y no atrapas
Cuando atrapas el tiempo y no trae nada

Hacia ti, la elegancia que persigues
Para ti, la timidez desposada

Para mí, tu tiempo de reposo
El mismo que veo tan lejano
El que espero ansiosa

Razonable
Sacando tiempo por si se acaba
Seductora
Recordando por si te agotas

¿Agotada?

Tuesday, June 13, 2006

Ciclos

Qué pasará cuando llegues y veas todo el desorden, todo el que me ha invadido y amenaza con no volver a dejarme encontrar ningún espacio en el que evadirme tranquila, sin pensarte, sin recordar si fue culpa tuya o mía. Aunque siempre haya defendido la responsabilidad compartida, los barrotes me han dejado a mí del lado más esclavo, y tú sigues libre para decidir si encarcelarte conmigo y buscar más tiempo después del que ya has tenido. Sólo cuando eches de menos no poder moverte sin rozar mi equilibrio, sólo cuando desesperes por mirar y encontrar las palabras tatuadas en mis paredes.
Todas y cada una hasta que ya no me quede saliva para pensarlas. Todos y cada uno de los besos que he dado y ahora no puedo más que verbalizar, porque me has dejado en la rutina más cruel, en la que me devuelve a tus opciones, rítmicas, pero impredecibles... y aún así, aún así me tienes en la palma de una mano que quizás no vuelva a lamentar no acariciarme, pero volverá a aferrarse a lo que la haga alejarse del metal, frío, que has elegido como ancla, sin tacto, para deshacerte de todo lo que suponga caminar con esfuerzo por un tierra que seguirá sin ser la tuya.
He empezado a divagar de nuevo, porque la cordura no supone nada nuevo en días y más días de amargo entusiasmo. La cordura me ata de nuevo a la inconsciencia de acercarme, de quemarme, de que me sumas en tu punto de acidez, en el mío, en el que ambas decidamos superviviente.

Y aún así, sobrevivo.

Friday, June 09, 2006

Tiempo

Cuando todas las horas pasen
Cuando resbalen los minutos por tus dedos
Hablarás despacio
Querrás contarme
Y yo sólo podré regalarte silencio